¿Y si el estancamiento fuera una oportunidad de crecimiento?

Sentirse estancado profesionalmente no es cómodo. Es una sensación que puede venir acompañada de frustración, dudas e incluso vergüenza. Pero, ¿y si en lugar de verlo como un fracaso, lo entendiéramos como una señal? Una invitación al cambio. Un momento para parar, mirar hacia dentro y reconectar con lo que realmente quieres.

En mi experiencia como coach laboral, he acompañado a muchas personas que se sentían atrapadas en una rutina profesional que ya no les hacía sentido. Y la buena noticia es que no necesitas tener todas las respuestas para empezar. Solo necesitas abrir el espacio para hacerte las preguntas adecuadas.

Estancarse no es retroceder. Es una pausa necesaria. Es el punto de partida de muchos procesos de transformación reales y profundos. A veces, solo hace falta alguien que te acompañe a mirar con otros ojos lo que ya sabes, pero no te has permitido escuchar.

¿Te reconoces en esta sensación? Entonces, quizá este sea tu momento.

Continuar Leyendo